Resumen de elcorner

Athletic 0 - 0 Zaragoza

El partido comenzó muy igualado, con reparto de ocasiones para ambos conjuntos, aunque la más clara en estos primeros compases fue la del Zaragoza, con buen remate de Aimar y buena parada de Aranzubia, todo esto después de un rechace fallido de despeje por parte de la defensa local. Aunque el Zaragoza pudo adelantarse en esta ocasión de Aimar, las llegadas al área eran más numerosas para el Athletic, y de vez en cuando con peligro. El conjunto rojiblanco también dominaba la posesión del cuero, por tanto manejaban el partido. Más o menos en el ecuador de la primera mitad, el Athletic comenzaba a acosar la portería de Cesar, sobre todo por mediación de Yeste a balón parado, pues como todos sabemos, él es un especialista en esta faceta del fútbol. Tanto era el dominio del Athletic, que la gente no se lo creía, porque hacía mucho tiempo que el conjunto bilbaino no manejaba a su antojo el partido de aquella forma. El Zaragoza, en estas últimas jornadas que no consigue los tres puntos, se está convirtiendo en el equipo simplón de otros años, lo que no le está gustando nada a Víctor Fernández, técnico maño. Pero es que el Zaragoza estaba tan dormido, que ni Diego Milito inquietó en toda la primera parte a Aranzubia, salvo ocasiones muy poco claras que no sirvieron de nada en el transcurso del partido. Además de esta circunstancia poco favorable para el conjunto maño, se suma a ello la lluvia de ocasiones creadas por el Athletic, algunas dignas de ser gol. Al final de la primera mitad, en sus últimos minutos, el Zaragoza comenzaba a poseer algo más el cuero; y tuvo una ocasión clara de disparo y de gol, que fue la internada de Ewerthon dentro del área con posterior remate del mismo, pero se va por muy poco a ras de palo. El Athletic se dio cuenta de que el Zaragoza se comenzaba a despertar de su sueño y estuvo a punto de adelantarse en el electrónico por mediación de Iraola, con un fuerte disparo que también se va por poco. El conjunto bilbaino trató de seguir la misma tónica de juego que en la primera mitad, pero el Zaragoza se despertaba por momentos y comenzó a crear ocasiones, la más clara la de Ewerthon. Aunque el conjunto maño comenzaba a tener ocasiones y a subir balones al área, el Athletic seguía con la tónica de dominar el cuero y también creaba ocasiones. El Zaragoza, al igual que el Athletic en la primera mitad, empezaba también a llegar con éxito a balón parado. Aunque esto sea cierto, el Athletic no se durmió con estas ocasiones ni mucho menos, sino que siguió vivo y dentro del partido. A partir de estos instantes de pasado el ecuador de la segunda mitad, el partido por primera vez comenzó a estar movido con ocasiones de peligro para ambos conjuntos. Hubo muchas ocasiones en estos compases finales, pero ninguno consiguió materializar y el encuentro termino con un punto para cada uno que no sirve a ninguno de los dos.

Juan Casielles