La Real Sociedad sacó un importante punto del Sánchez Pizjuán ante un Sevillla que no termina de funcionar, al menos como lo hizo al inicio de temporada (0-0). Los de Lotina defendieron con mucho orden y se lo pusieron muy difícil a los de Juande Ramos. Tapando los huecos y trabajando como equipo, lograron frenar el potencial ofensivo del Sevilla. Con este punto, el Sevilla suma 42 y se mantiene arriba, mientras que la Real Sociedad agradece cualquier cosa que sea sumar y, aunque las oportunidades de salvación se le van agotando con 14 puntos en su casillero, el Sevilla era un complicado rival para iniciar la remontada.La Real se presento en en el Pizjuán con la misión de defenderse y lo logró durante toda la primera parte. Los de Lotina taparon todos los huecos posibles para que los de Juande no encontraran por donde llegar hasta los dominios de Bravo. Los sevillistas lo intentaron, se acercaron y controlaron el partido, aunque sin claridad de ideas ofensivas. Eso sí, la Real Sociedad hizo bien al no confiarse: cualquier ocasión podía envenenarse y 'matarle'. Aguantó atrás, presionó, trabajó y evitó todo lo que pudo. Poco a poco, el Sevilla le empezó a meter otra velocidad al encuentro. La ocasión más clara la tuvo Kerzhakov al cabecear al larguero un centro peligroso de Adriano desde la izquierda. Y la Real, lejos hasta entonces de Palop, sorprendió con un disparo de Xabi Prieto a pase de Savio. De ahí al descanso, el Pizjuán asistió a buenos minutos de su equipo. Algo más creativos y con Alves como jugador más desequilibrante, los sevillistas tuvieron sus opciones y llegaron a merecer algo más.En la segunda parte, la Real Sociedad siguió ejerciendo la misma presión que en la primera mitad le convirtió en un equipo incómodo de atravesar y, además, se animó a hacer aisladas visitas a Palop. Los cambios de Lotina dieron su fruto y el equipo se movió con más soltura. A Kovacevic sólo le hicieron falta cinco minutos sobre el césped del Pizjuán para disponer (y a la vez desperdiciar) de la ocasión más clara de los suyos hasta el momento al cabecear un buen centro Uranga desde la izquierda. Las esperanzas de los de Lotina en estos partidos se reducen a acertar en ocasiones como estas. El caso es que el Sevilla empezaba a desesperarse. Jugaba más cerca del área que el rival, pero el gol no llegaba y se alejaba una ocasión de oro de subir otro escalón en la lucha por la Liga (por resultados, un sueño cada vez más real para los hispalenses). La Real, que aguantaba a todo un Sevilla a base de concentración y trabajo, llegó a tener los tres puntos muy cerca. A diez minutos del final, Elustondo se inventó una gran ocasión para el 0-1 con un disparo tan lejano como peligroso que puso en un aprieto a Polop. Luis Fabiano pudo desequilibrar la balanza del lado nervionense pero remató mal ante Bravo. 

Andrés Fernández
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